La Voz del Interior, Argentina
12 mayo 2013
"El reconocimiento del Genocidio Armenio recorrió un camino exitoso en
Argentina"
Mario Nalpatian, vicepresidente de la Internacional Socialista,
reivindicó la lucha constante y pacífica por la causa armenia. El
reclamo incluye, además, una reparación por el crimen.
por Pedro Luque
El 24 de abril se conmemoró en Córdoba, como en todo el mundo, el 98º
aniversario del Genocidio Armenio, la deportación y exterminio de un
millón y medio a dos millones de personas con que arrancó el siglo 20,
el llamado `genocidio olvidado' que perpetró el Imperio Otomano entre
1915 y 1923.
Cerca de cumplirse un siglo del comienzo de esas matanzas, que
condenaron al exilio a cientos de miles de armenios, sus descendientes
llevan adelante una campaña de difusión para que el mundo, y sobre
todo sus perpetradores, admitan la existencia de aquel exterminio.
`Yo soy la tercera generación posterior al genocidio. Para nosotros,
lo más importante es su reconocimiento por parte de Turquía, que lo
planificó y ejecutó, y también la reparación', asegura Mario
Nalpatian, miembro del Consejo Nacional Armenio Mundial y quien el año
pasado fue elegido vicepresidente de la Internacional Socialista.
De visita en Córdoba sólo unos días después de los actos
conmemorativos por el nuevo aniversario del Genocidio, Nalpatian habló
con La Voz del Interior sobre el reconocimiento de esos hechos por
parte de Argentina y del mundo. Además, se refirió a la actualidad de
Armenia y a los sucesos que hoy hacen temblar otra vez aquella
inestable región.
`Creo que nuestra lucha sirve para que otros pueblos, que también han
sido víctimas de crímenes de lesa humanidad, vean en el espejo armenio
que la lucha es posible, que la reivindicación pacífica, sin ánimo de
venganza pero firme y constante, es posible', afirma.
-¿Hasta dónde los ha llevado esa reivindicación pacífica y constante?
-El reconocimiento del Genocidio existe, la comunidad internacional lo
tiene asumido, sabe lo que pasó. Pero hay países que por cuestiones
políticas, como Estados Unidos, no lo reconoce. (Barack) Obama fue uno
de los principales defensores del reconocimiento mientras fue senador.
Pero, desde que asumió la presidencia, las declaraciones oficiales de
cada año no usan la palabra Genocidio. Se debe a una cuestión política
y de presión de Turquía, aliado fundamental en una región demasiado
convulsiva. Sin embargo, casi todos los países europeos lo reconocen.
En Latinoamérica, lo reconocieron Chile, Uruguay, Venezuela y
Argentina.
-¿Cómo se transitó en Argentina ese camino de reconocimiento?
-El reconocimiento del Genocidio en Argentina recorrió un camino, si
puede decirse, exitoso. Después del retorno de la democracia, en 1985
tanto la Cámara de Senadores como Diputados reconocieron
parlamentariamente el Genocidio. En 1987, el presidente (Raúl)
Alfonsín reconoció la existencia del Genocidio Armenio. En 2007, se
sancionó la ley 26.199, que reconoce el Genocidio Armenio. Y en 2010,
una sentencia del juez (Norberto) Oyarbide reconoció desde el Poder
Judicial el Genocidio Armenio y el derecho a la verdad de los
sobrevivientes y de sus descendientes, lo que marca un punto de
inflexión.
-En dos años se cumplirá el centenario de ese crimen. ¿Cómo incidirá
en la causa armenia?
-El centenario tendrá una trascendencia muy grande. Los armenios, en
general, sabemos que la etapa de reconocimiento no se agotó aún. Sin
embargo, ahora lo que exigimos es no sólo que Turquía reconozca el
Genocidio y asuma su responsabilidad, sino que lleve a cabo medidas
para la reparación del crimen cometido. Hablamos de indemnización, de
devolución de territorio, de preservación de monumentos culturales de
la Iglesia armenia... El reconocimiento tiene muchas acepciones.
-Después de negarlo durante casi un siglo, ¿por qué Turquía cambiaría
ahora su posición?
-En la medida en que Turquía se profundice como Estado democrático,
eso contribuirá. En ese país hay un deep state , un Estado profundo
que tiene el verdadero poder. Mientras este vaya cediendo espacio y
aparezca una Turquía democrática, con alternancia entre distintos
partidos, podrá haber un cambio de mentalidad. Cuando en 1923 se fundó
la actual república de Turquía, se borró el pasado inmediato del país.
Hay generaciones de turcos y clases políticas que se educaron y
crecieron desconociendo su pasado inmediato. Pero nuestro activismo
obligó a los turcos a tomar nota e incluir en su agenda política la
cuestión armenia.
http://www.lavoz.com.ar/noticias/mundo/reconocimiento-genocidio-armenio-recorrio-camino-exitoso-argentina
12 mayo 2013
"El reconocimiento del Genocidio Armenio recorrió un camino exitoso en
Argentina"
Mario Nalpatian, vicepresidente de la Internacional Socialista,
reivindicó la lucha constante y pacífica por la causa armenia. El
reclamo incluye, además, una reparación por el crimen.
por Pedro Luque
El 24 de abril se conmemoró en Córdoba, como en todo el mundo, el 98º
aniversario del Genocidio Armenio, la deportación y exterminio de un
millón y medio a dos millones de personas con que arrancó el siglo 20,
el llamado `genocidio olvidado' que perpetró el Imperio Otomano entre
1915 y 1923.
Cerca de cumplirse un siglo del comienzo de esas matanzas, que
condenaron al exilio a cientos de miles de armenios, sus descendientes
llevan adelante una campaña de difusión para que el mundo, y sobre
todo sus perpetradores, admitan la existencia de aquel exterminio.
`Yo soy la tercera generación posterior al genocidio. Para nosotros,
lo más importante es su reconocimiento por parte de Turquía, que lo
planificó y ejecutó, y también la reparación', asegura Mario
Nalpatian, miembro del Consejo Nacional Armenio Mundial y quien el año
pasado fue elegido vicepresidente de la Internacional Socialista.
De visita en Córdoba sólo unos días después de los actos
conmemorativos por el nuevo aniversario del Genocidio, Nalpatian habló
con La Voz del Interior sobre el reconocimiento de esos hechos por
parte de Argentina y del mundo. Además, se refirió a la actualidad de
Armenia y a los sucesos que hoy hacen temblar otra vez aquella
inestable región.
`Creo que nuestra lucha sirve para que otros pueblos, que también han
sido víctimas de crímenes de lesa humanidad, vean en el espejo armenio
que la lucha es posible, que la reivindicación pacífica, sin ánimo de
venganza pero firme y constante, es posible', afirma.
-¿Hasta dónde los ha llevado esa reivindicación pacífica y constante?
-El reconocimiento del Genocidio existe, la comunidad internacional lo
tiene asumido, sabe lo que pasó. Pero hay países que por cuestiones
políticas, como Estados Unidos, no lo reconoce. (Barack) Obama fue uno
de los principales defensores del reconocimiento mientras fue senador.
Pero, desde que asumió la presidencia, las declaraciones oficiales de
cada año no usan la palabra Genocidio. Se debe a una cuestión política
y de presión de Turquía, aliado fundamental en una región demasiado
convulsiva. Sin embargo, casi todos los países europeos lo reconocen.
En Latinoamérica, lo reconocieron Chile, Uruguay, Venezuela y
Argentina.
-¿Cómo se transitó en Argentina ese camino de reconocimiento?
-El reconocimiento del Genocidio en Argentina recorrió un camino, si
puede decirse, exitoso. Después del retorno de la democracia, en 1985
tanto la Cámara de Senadores como Diputados reconocieron
parlamentariamente el Genocidio. En 1987, el presidente (Raúl)
Alfonsín reconoció la existencia del Genocidio Armenio. En 2007, se
sancionó la ley 26.199, que reconoce el Genocidio Armenio. Y en 2010,
una sentencia del juez (Norberto) Oyarbide reconoció desde el Poder
Judicial el Genocidio Armenio y el derecho a la verdad de los
sobrevivientes y de sus descendientes, lo que marca un punto de
inflexión.
-En dos años se cumplirá el centenario de ese crimen. ¿Cómo incidirá
en la causa armenia?
-El centenario tendrá una trascendencia muy grande. Los armenios, en
general, sabemos que la etapa de reconocimiento no se agotó aún. Sin
embargo, ahora lo que exigimos es no sólo que Turquía reconozca el
Genocidio y asuma su responsabilidad, sino que lleve a cabo medidas
para la reparación del crimen cometido. Hablamos de indemnización, de
devolución de territorio, de preservación de monumentos culturales de
la Iglesia armenia... El reconocimiento tiene muchas acepciones.
-Después de negarlo durante casi un siglo, ¿por qué Turquía cambiaría
ahora su posición?
-En la medida en que Turquía se profundice como Estado democrático,
eso contribuirá. En ese país hay un deep state , un Estado profundo
que tiene el verdadero poder. Mientras este vaya cediendo espacio y
aparezca una Turquía democrática, con alternancia entre distintos
partidos, podrá haber un cambio de mentalidad. Cuando en 1923 se fundó
la actual república de Turquía, se borró el pasado inmediato del país.
Hay generaciones de turcos y clases políticas que se educaron y
crecieron desconociendo su pasado inmediato. Pero nuestro activismo
obligó a los turcos a tomar nota e incluir en su agenda política la
cuestión armenia.
http://www.lavoz.com.ar/noticias/mundo/reconocimiento-genocidio-armenio-recorrio-camino-exitoso-argentina