Diario de Carlos Paz, Argentina
24 abril 2014
Comienza el centenario del Genocidio Armenio
¿Oculto y negado? Si, 100 años oculto y negado. ¿Por quién? Por la
República de Turquía, heredera jurídica del Imperio Otomano,
responsable de aquel, el primer genocidio del siglo XX, el siglo de
los genocidios.
Por Mariano Saravia
Hoy comienza el centenario del Genocidio Armenio. Es decir, desde hoy
comenzamos la cuenta regresiva hasta el 24 de abril de 2015, cuando se
conmemore el centenario de este genocidio aún hoy oculto y negado.
¿Oculto y negado? Si, 100 años oculto y negado. ¿Por quién? Por la
República de Turquía, heredera jurídica del Imperio Otomano,
responsable de aquel, el primer genocidio del siglo XX, el siglo de
los genocidios.
Ese 24 de abril de 1915 el gobierno de los Jóvenes Turcos detuvo y
luego asesinó a los 600 principales intelectuales armenios, entre
profesionales, artistas, estudiantes y dirigentes comunitarios. Luego
siguieron los hombres que fueron reclutados y ejecutados. Y por
último, las mujeres, ancianos y niños, trasladados por la fuerza en
deportaciones masivas hacia la muerte del desierto.
En total, un millón y medio de armenios exterminados entre 1915 y
1923. ¡Un millón y medio de personas! Lo mismo que la actual población
de la ciudad de Córdoba, para que usted se dé una idea.
Y después, la impunidad total. Una impunidad que está cumpliendo 100
años. Ni memoria, ni verdad, ni justicia, a pesar de la lucha
inquebrantable del pueblo armenio, en la Madre Patria y en la
diáspora, esparcida por toda la tierra, pero concentrada
principalmente en Rusia, Siria, El Líbano, Grecia, Irán, Gran Bretaña,
Francia, Estados Unidos y Argentina.
Si, Argentina, y también Córdoba. En Buenos Aires viven unos 100.000
descendientes de armenios, principalmente en los barrios de Palermo y
Valentín Alsina (Lanús). Y en Córdoba unos 10.000, sobre todo en
Barrio Pueyrredón, alrededor de esa columna vertebral que es la
Avenida Patria.
Por eso, no le extrañe a usted ver hoy marchar al mediodía desde Patio
Olmos hasta la Plaza San Martín de la ciudad de Córdoba a centenas de
jóvenes, adultos, hombres y mujeres, con banderas rojas, azules y
naranjas o con carteles que digan "Turquía, Estado genocida".
Una impunidad de 100 años. Una impunidad criminal no sólo por el
genocidio que niega sino por los genocidios que propicia. Porque el
negacionismo tiene siempre esa doble perversión. De hecho, todavía se
recuerda aquel famoso discurso de Adolf Hitler del 28 de agosto de
1939 en el que preguntó muy suelto de cuerpo a sus oficiales: "¿Quién
recuerda hoy la masacre de los armenios?".
Pero esa impunidad de 100 años no es sólo de Turquía, sino también del
resto del mundo que prefirió y sigue prefiriendo mirar para otro lado.
De hecho, sólo una veintena de países reconocen al día de hoy el
Genocidio Armenio. Entre ellos, la Argentina, desde 2007, por una ley
del Congreso promulgada por el ex presidente Néstor Kirchner. Y
también por un fallo de la Justicia Federal. Es decir, los tres
poderes del Estado.
Pero se dan situaciones extremas como que el Estado de Israel no
reconozca este genocidio, antecedente directo de la Shoá. Ni tampoco
lo reconoce Estados Unidos, a pesar de que todos los presidentes,
cuando fueron antes candidatos, prometieron hacerlo.
La impunidad se alimenta de la indiferencia y alimenta a su vez
futuros genocidios. Todos son políticamente correctos y ante estos
temas repiten algún comentario de ocasión, como "qué barbaridad" o
"son monstruos inhumanos". Pero eso no es más que un pensamiento
mágico que tranquiliza conciencias y que da lugar a lo que llamo "un
Nunca Más bobo", porque se repite lo de "Nunca Más" pero sin hacer
nada para que sea una realidad.
Si realmente queremos un verdadero Nunca Más, debemos empezar por
conocer lo más cruel de la condición humana, aunque nos duela, y
seguir por comprender lo inexplicable. Recién así podremos
comprometernos contra todo tipo de genocidios, de negación del otro,
empezando por comprometernos contra la impunidad, como esta que cumple
100 años.
Pero si usted llegó hasta aquí leyendo este artículo, ya es un buen
punto a favor de la humanidad, porque desde hoy ya usted no puede
seguir siendo indiferente, ni al Genocidio Armenio ni a ningún otro
genocidio, la aberración humana.
http://www.eldiariodecarlospaz.com/sociedad/2014/4/24/comienza-centenario-genocidio-armenio-583.html
24 abril 2014
Comienza el centenario del Genocidio Armenio
¿Oculto y negado? Si, 100 años oculto y negado. ¿Por quién? Por la
República de Turquía, heredera jurídica del Imperio Otomano,
responsable de aquel, el primer genocidio del siglo XX, el siglo de
los genocidios.
Por Mariano Saravia
Hoy comienza el centenario del Genocidio Armenio. Es decir, desde hoy
comenzamos la cuenta regresiva hasta el 24 de abril de 2015, cuando se
conmemore el centenario de este genocidio aún hoy oculto y negado.
¿Oculto y negado? Si, 100 años oculto y negado. ¿Por quién? Por la
República de Turquía, heredera jurídica del Imperio Otomano,
responsable de aquel, el primer genocidio del siglo XX, el siglo de
los genocidios.
Ese 24 de abril de 1915 el gobierno de los Jóvenes Turcos detuvo y
luego asesinó a los 600 principales intelectuales armenios, entre
profesionales, artistas, estudiantes y dirigentes comunitarios. Luego
siguieron los hombres que fueron reclutados y ejecutados. Y por
último, las mujeres, ancianos y niños, trasladados por la fuerza en
deportaciones masivas hacia la muerte del desierto.
En total, un millón y medio de armenios exterminados entre 1915 y
1923. ¡Un millón y medio de personas! Lo mismo que la actual población
de la ciudad de Córdoba, para que usted se dé una idea.
Y después, la impunidad total. Una impunidad que está cumpliendo 100
años. Ni memoria, ni verdad, ni justicia, a pesar de la lucha
inquebrantable del pueblo armenio, en la Madre Patria y en la
diáspora, esparcida por toda la tierra, pero concentrada
principalmente en Rusia, Siria, El Líbano, Grecia, Irán, Gran Bretaña,
Francia, Estados Unidos y Argentina.
Si, Argentina, y también Córdoba. En Buenos Aires viven unos 100.000
descendientes de armenios, principalmente en los barrios de Palermo y
Valentín Alsina (Lanús). Y en Córdoba unos 10.000, sobre todo en
Barrio Pueyrredón, alrededor de esa columna vertebral que es la
Avenida Patria.
Por eso, no le extrañe a usted ver hoy marchar al mediodía desde Patio
Olmos hasta la Plaza San Martín de la ciudad de Córdoba a centenas de
jóvenes, adultos, hombres y mujeres, con banderas rojas, azules y
naranjas o con carteles que digan "Turquía, Estado genocida".
Una impunidad de 100 años. Una impunidad criminal no sólo por el
genocidio que niega sino por los genocidios que propicia. Porque el
negacionismo tiene siempre esa doble perversión. De hecho, todavía se
recuerda aquel famoso discurso de Adolf Hitler del 28 de agosto de
1939 en el que preguntó muy suelto de cuerpo a sus oficiales: "¿Quién
recuerda hoy la masacre de los armenios?".
Pero esa impunidad de 100 años no es sólo de Turquía, sino también del
resto del mundo que prefirió y sigue prefiriendo mirar para otro lado.
De hecho, sólo una veintena de países reconocen al día de hoy el
Genocidio Armenio. Entre ellos, la Argentina, desde 2007, por una ley
del Congreso promulgada por el ex presidente Néstor Kirchner. Y
también por un fallo de la Justicia Federal. Es decir, los tres
poderes del Estado.
Pero se dan situaciones extremas como que el Estado de Israel no
reconozca este genocidio, antecedente directo de la Shoá. Ni tampoco
lo reconoce Estados Unidos, a pesar de que todos los presidentes,
cuando fueron antes candidatos, prometieron hacerlo.
La impunidad se alimenta de la indiferencia y alimenta a su vez
futuros genocidios. Todos son políticamente correctos y ante estos
temas repiten algún comentario de ocasión, como "qué barbaridad" o
"son monstruos inhumanos". Pero eso no es más que un pensamiento
mágico que tranquiliza conciencias y que da lugar a lo que llamo "un
Nunca Más bobo", porque se repite lo de "Nunca Más" pero sin hacer
nada para que sea una realidad.
Si realmente queremos un verdadero Nunca Más, debemos empezar por
conocer lo más cruel de la condición humana, aunque nos duela, y
seguir por comprender lo inexplicable. Recién así podremos
comprometernos contra todo tipo de genocidios, de negación del otro,
empezando por comprometernos contra la impunidad, como esta que cumple
100 años.
Pero si usted llegó hasta aquí leyendo este artículo, ya es un buen
punto a favor de la humanidad, porque desde hoy ya usted no puede
seguir siendo indiferente, ni al Genocidio Armenio ni a ningún otro
genocidio, la aberración humana.
http://www.eldiariodecarlospaz.com/sociedad/2014/4/24/comienza-centenario-genocidio-armenio-583.html